Ahora que el mundo está recién pintado
Este poemilla, sin rima, sencillo y rápido, tiene tras de sí una historia que comenzó hace unos meses, cuando ocurrió algo que me obligó tajantemente a escribirlo. Curiosamente, nada más escribirlo lo rompí, pues no estaba seguro no del poema ni de lo que en él decía, sino de en qué pensaba exactamente o qué objeto tenía. Pero el tiempo pasó, y ese textito permaneció macerando, sin querer irse, agarrado al recuerdo con las uñas descarnadas sin querer irse, zafándose del olvido y ganándose a pulso su reconocimiento. Es por eso que hoy lo publico. No como era exactamente, pero sí diciendo lo mismo que quería decir.
Oración atea.
No quiero empapar mi camiseta con tus lágrimas otra vez,
ni quiero tener que volver a correr para consolarte,
tampoco quiero que haya más abrazos tristes
ni morir más al verte así.
Pero también pide este ateo,
pide para tener la camiseta seca y presta las veces que haga falta,
pide para cortar el viento en un segundo y aparecer a tu lado cuando lo necesites,
pide para que sus brazos sigan fuertes y no tiemblen al sostenerte,
pide para resucitar siempre y poder seguir ahí
y pide que tú un día, al igual que hice yo, descubras que una persona no se va de nuestro lado mientras la recordemos.
4 comentarios
Marina -
... luego he visto que la fecha es de hace 2 meses y me ha entrado la risa ¡ni se te ocurra tardar en volver a actualizar lo que he tardado yo! que tu no tienes escusa ;P
Laura -
Raquel -
Laura -